Argumentación

En la película Gritos y susurros, de Ingman Bergman, la relación entre Agnes y sus hermanas se da por compromiso y no por amor. El cuidado de un enfermo es un trabajo difícil que debe realizarse por amor a la persona y no por una obligación impuesta. Karin y María actuaban de forma indiferente ante el dolor de Agnes, pero esto se puede comprender porque el interés y la preocupación por otra persona se dan cuando existe el amor entre los familiares. Según la definición de la Real Academia Española, el amor es un sentimiento hacia otra persona que nos alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear.
La convivencia con un enfermo terminal genera un fuerte impacto emocional sobre las personas que los rodean; sentimientos como la preocupación, la angustia, el temor y la tristeza invaden a sus familiares al observar el sufrimiento de su ser querido y al estar concientes de que en cualquier momento podrían perderlo.
La familia experimenta muchos cambios en su ritmo de vida debido a los cuidados que debe proporcionarle al paciente. La relación con un enfermo terminal deja de ser recíproca, ya que sólo está en condiciones de recibir y esto dificulta la comunicación entre los parientes.
El cuidado de un enfermo terminal se complica cuando los familiares se encuentran simultáneamente frente a otras situaciones estresantes o cuando existen problemas personales, como lo podemos observar en la película, Ana, Karin y María vivieron momentos difíciles que modificaron su forma de ver la vida. Ana fortaleció su fe con la muerte de su hija y trató de ayudar a Agnes en todo momento, Karin y María buscaron restablecer la relación de hermanas que habían perdido, pero no pudieron por el egoísmo que las rodeaba.
Como lo indica el médico oncólogo, Jorge A. Gómez Calle, la enfermedad terminal altera la unidad social y hace que afloren los conflictos internos preexistentes, como se puede apreciar en el filme, la relación entre Agnes y sus hermanas era de apatía, los lazos afectivos habían desaparecido y cada día la convivencia se tornaba más difícil.
Basándonos en el trabajo de Kübler-Ross y en su teoría sobre los cinco estadíos de la muerte, se tiene la idea de que las personas pasan por distintas fases en el proceso de enfrentamiento con la muerte, esto no quiere decir que el paciente tenga que pasar por todos los estadíos, eso depende de las circunstancias y emociones que vive la persona. Tal como los propuso Kübler-Ross, los estadíos son: negación, ira, negociación, depresión y aceptación. Agnes se encuentra en el estadío de aceptación, donde está resignada a morir y lo único que busca es un momento de paz y tranquilidad con Ana y sus hermanas.
Los seres humanos reaccionamos de diferente forma ante las situaciones que nos presenta la vida, esto depende de nuestra personalidad y de las experiencias vividas, es por eso que algunas personas como Ana, brindan amor y ayuda al que lo necesita, mientras que otros como Karin y María tratan de apoyar cuando realmente no lo desean.